Las bolsas americanas han quedado bloqueadas al poco de comenzar la sesión cuando ya se desplomaban un 7%, y han retomado las caídas con descensos que han rozado el 10%. Por segunda vez en lo que va del crash del coronavirus vuelven a activarse los ‘cortafuegos’ (circuits breakers), mecanismos que paralizan el mercado automáticamente para evitar un incremento descontrolado del pánico. Fue Donald Trump quien dio la puntilla a las bolsas al anunciar el miércoles de madrugada en Europa que cerraba el espacio aéreo a los pasajeros que volaran desde el Viejo Continente. Si bien la medida iba destinada a contener la propagación del Covid-19, los mercados reaccionaron con pánico.
La bolsa de Nueva York ya sufrió ayer pérdidas del 5%, pero el escenario este jueves es aún peor: el S&P 500 ha reventado el soporte de los 2.700 puntos, dando paso a «un crash en toda regla», como anticipaba el director de Estrategia de Ecotrader, Joan Cabrero.
Las caídas de hoy han llegado a tal magnitud, con más de un 9% en el Dow Jones, que hay remontarse al lunes negro de 1987 para ver algo igual. Sin embargo, tras el anuncio de la Fed de que inyectará 500.000 millones en liquidez a 3 meses para paliar los efectos del coronavirus, la caída se mitigó en un primer momento, aunque perdió un 10% al cierre de la sesión en Nueva York.
El S&P 500 ha hecho pedazos el soporte de los 2.700 puntos este jueves, el nivel que mantenía la esperanza de que las bolsas encontraran suelo. En consecuencia, la bolsa de Nueva York abrirá la puerta a pérdidas adicionales del 13% en el corto plazo, hasta los 2.350 puntos del selectivo norteamericano, los mínimos de 2018, calcula Cabrero.
De este modo, «técnicamente, ha finalizado la tendencia alcista que nación en 2009», sentenciaba Cabrero. Desde Ecotrader, el portal de inversión para suscriptores de elEconomista, se ha reducido la exposición a índices y se espera a que llegue un rebote para deshacer otras posiciones.